Examinadlo todo; retened lo bueno. Absteneos de toda forma de mal.
1 Tesalonicenses 5: 21-22
Mateo 24:7 Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino, y en diferentes lugares habrá hambre y terremotos.
Noticia
Fuente
Como informa la agencia RIA Novosti, el terremoto, en cuyo epicentro la magnitud fue de 8-9 grados, tuvo lugar a 10 kilómetros de profundidad. Las réplicas, con fuerza de 2 a 4 grados, se sucedieron en las regiones vecinas a Tiva.
Un grupo de residentes son realojados después del terremoto. Foto de Maxim Jódorov, RIA Novosti
Serguéi Shoigi, titular del Ministerio de Situaciones de Emergencia (MSE), ofreció anoche una teleconferencia en la que señaló que nunca hasta la fecha se había registrado en Tiva un terremoto semejante en toda la historia de la recogida de datos sobre seísmos en la región. Con respecto a sus consecuencias, el ministro declaró: “Tiva tuvo mucha suerte. Recemos para que algo semejante no vuelva a ocurrir”.
El sur de la Siberia Oriental está considerado región con peligro sísmico, pero los terremotos no ocurren a menudo. Posiblemente por este motivo, como señalan algunos testigos, el terremoto cogió a todos desprevenidos. En un reportaje publicado en Business FM, Tamara Shirizhik, habitante de Kizil, describió así la situación: “Estaba de guardia en el hospital, un edificio de madera de un piso. El ruido fue tremendo y después todo tembló con gran intensidad. No pudimos comunicarnos con el MSE, pero, en cualquier caso, vestimos a todos los pacientes. No se podía caminar, el suelo se movía de un lado para otro. Hasta que llegó el día casi nadie durmió. Mucha gente se reunió en la calle, salían desvestidos de sus casas, todos con mucho miedo. Cogían a los niños en brazos y salían. Y en la calle estamos a 30 bajo cero”.
En el epicentro directo del terremoto viven unas 12.000 personas. La gente tuvo que abandonar sus casas, ya que fue realizada una evacuación parcial. En la capital de la república, según palabras del vicepresidente de Tiva, Dina Oiun, citadas por ITAR-TASS, cerca de 500 de las cien mil personas que allí residen pasaron la noche fuera de sus casas, en escuelas y jardines de infancia. También fueron evacuados los trabajadores de las minas y explotaciones de montaña.
Ahora, pese a que se ha declarado la situación de emergencia, el panorama en la región del seísmo permanece tranquilo. Mucha gente ha vuelto a su casa y se están evaluando los daños.
Víktor Selezniov, director del Servicio Geofísico de la Sección Siberiana de la Academia de Ciencias de Rusia, informó a RIA Novosti de que “en la región, este terremoto no alcanzó su fuerza máxima. Según los datos de la regionalización sísmica, la parte sur de Tiva es peligrosa. Temblores de tierra como el de ayer se repiten en esta área con una periodicidad de diez años y, aproximadamente cada cien, con una intensidad aún mayor”.
El científico también informó de que este fue el primer terremoto fuerte en el que se probó el sistema automático de recogida de datos del Servicio Geofísico. A los tres minutos del comienzo del seísmo, este sistema ya había dado información exacta sobre sus coordenadas y magnitud.
-----------------------------------
Como informa la agencia RIA Novosti, el terremoto, en cuyo epicentro la magnitud fue de 8-9 grados, tuvo lugar a 10 kilómetros de profundidad. Las réplicas, con fuerza de 2 a 4 grados, se sucedieron en las regiones vecinas a Tiva.
Un grupo de residentes son realojados después del terremoto. Foto de Maxim Jódorov, RIA Novosti
El sur de la Siberia Oriental está considerado región con peligro sísmico, pero los terremotos no ocurren a menudo. Posiblemente por este motivo, como señalan algunos testigos, el terremoto cogió a todos desprevenidos. En un reportaje publicado en Business FM, Tamara Shirizhik, habitante de Kizil, describió así la situación: “Estaba de guardia en el hospital, un edificio de madera de un piso. El ruido fue tremendo y después todo tembló con gran intensidad. No pudimos comunicarnos con el MSE, pero, en cualquier caso, vestimos a todos los pacientes. No se podía caminar, el suelo se movía de un lado para otro. Hasta que llegó el día casi nadie durmió. Mucha gente se reunió en la calle, salían desvestidos de sus casas, todos con mucho miedo. Cogían a los niños en brazos y salían. Y en la calle estamos a 30 bajo cero”.
En el epicentro directo del terremoto viven unas 12.000 personas. La gente tuvo que abandonar sus casas, ya que fue realizada una evacuación parcial. En la capital de la república, según palabras del vicepresidente de Tiva, Dina Oiun, citadas por ITAR-TASS, cerca de 500 de las cien mil personas que allí residen pasaron la noche fuera de sus casas, en escuelas y jardines de infancia. También fueron evacuados los trabajadores de las minas y explotaciones de montaña.
Ahora, pese a que se ha declarado la situación de emergencia, el panorama en la región del seísmo permanece tranquilo. Mucha gente ha vuelto a su casa y se están evaluando los daños.
Víktor Selezniov, director del Servicio Geofísico de la Sección Siberiana de la Academia de Ciencias de Rusia, informó a RIA Novosti de que “en la región, este terremoto no alcanzó su fuerza máxima. Según los datos de la regionalización sísmica, la parte sur de Tiva es peligrosa. Temblores de tierra como el de ayer se repiten en esta área con una periodicidad de diez años y, aproximadamente cada cien, con una intensidad aún mayor”.
El científico también informó de que este fue el primer terremoto fuerte en el que se probó el sistema automático de recogida de datos del Servicio Geofísico. A los tres minutos del comienzo del seísmo, este sistema ya había dado información exacta sobre sus coordenadas y magnitud.
-----------------------------------
¡Cuidate!
¡Dios te bendiga, el Señor viene pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario