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domingo, 19 de abril de 2009

Buscando Poder Político Nuevamente

¿Por qué será que el Vaticano siempre anda detrás del poder político para lograr sus fines, cuando debiera estar atendiendo la salud espiritual de su iglesia y sus miembros? Nuestro Señor Jesucristo nos dijo claramente que su “reino no es de este mundo” (Juan 18:36) No es de este mundo porque este mundo está dominado por el mal y por el padre de la mentira. Si el Vaticano profesa ser seguidor de Jesucristo, entonces, ¿por qué tanto empeño en intervenir en asuntos políticos y tanta ambición por el control de los gobiernos mundiales?

¿No es fornicario y adúltero el que se prostituye con este mundo?

Apocalipsis 17:1-2
17:1 Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas;
17:2 con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.

Ratzinger en la ONU


Santiago 4:4 – “¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.”


Los hijos de Dios no tenemos nada que ver con este mundo. En Juan 17:16 Jesús nos dice que nosotros no somos de este mundo así como tampoco él es de este mundo. Somos meramente peregrinos cumpliendo con un propósito: ganar almas para el Reino de los Cielos. “Y el que gana almas es sabio.” (Proverbios 11:30)

Aunque muchos no lo quieran aceptar el Sistema Papal cumple con todas de las características que describen a la iglesia apóstata que ejerce su poder sobre el gobierno mundial.


Apocalipsis 17:3-6
17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
17:4 Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación;
17:5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
17:6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.



(Queremos aclarar que estas profecías no hablan en contra de las personas de esta comunidad religiosa que sinceramente aman a Dios, sino que mas bien denuncian al sistema papal y sus falsas doctrinas que van en contra de la Palabra de Dios. Dios advierte a estas personas que sinceramente le aman a que salgan de este sistema apóstata: Apocalipsis 18:4 - “Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas.")

Si vamos atrás en la historia encontramos que el Sistema Papal tuvo un período de supremacía por 1,200 años donde ejerció control sobre reyes y emperadores (desde el año 538 hasta el año 1798). Tanto así que todo aquel que fuera en contra de sus enseñanzas, no importando su nivel social, era considerado un hereje y era cruelmente asesinado. Un poder religioso haciendo uso del poder político trae estas terribles consecuencias. Las Cruzadas y las Santas Inquisiciones tristemente nos recuerdan los hechos sangrientos de esa época. Este dominio terminó el 10 de febrero de 1798 cuando un ejército francés al mando del General Berthier, entró en Roma y llevó al papa preso a Francia.
“Berthier recibe de Bonaparte el mando del Ejército tras el Tratado de Campo Formio. Desde este puesto ordena ocupar Roma en 1798 y comienza a organizar la nueva República Romana en los territorios de los antiguos Estados Pontificios.”
“En estos meses de intensa actividad, a una orden de Napoleón, Berthier ordena apresar al Papa Pío VI y llevarle como prisionero a Francia. Aunque fue tratado con todos los honores, se le priva de todo poder político así como de la escolta de su Guardia Suiza, que fue sustituida por soldados de la República. El papa moriría un año después dejando vacante la sede pontificia. Esta actuación supuso el primer intento por parte de un estado para destruir el poder político de la Iglesia, como testimonió el propio Berthier, que declaró entonces: "Toda autoridad temporal que emane del antiguo gobierno del Papa ha de ser suprimida y éste no ha de volver a ejercer ninguna función semejante".”
Es en ese entonces cuando el Sistema Papal recibe su “herida mortal” profetizada en Apocalipsis 13:3: “Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia.”
En este mismo pasaje vemos que su herida iba a ser sanada. Aunque el Papado ha mantenido siempre su poder religioso, no fue así con su poder político. No “murió”, solamente fue “herida”.
Mas adelante en la historia podemos ver como esa “herida” comenzó a sanar. En el año 1929 fue firmado el “Tratado de Letrán”, el cual concedía autonomía total al Vaticano como un estado político dentro de Roma en la república italiana. De esa fecha en adelante, el Papado ha recobrado su prestigio y poder.
En Apocalipsis 17:8 vemos como este “reino” dominado por la iglesia apóstata volverá a surgir. “La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.”
¿Cuál sistema religioso en nuestra historia actual anda detrás de ese control político nuevamente? Claro no anda tan abiertamente. Veamos…
La Iglesia Católica tiene la firme convicción de que su misión fundamental es convertir a todos, no al CRISTIANISMO, sino al CATOLICISMO, por lo tanto esto la lleva a tener contacto y muy a menudo gran conflicto con campos adyacentes a la religión.
“Los principios religiosos no sólo consisten en formulas teológicas y espirituales, sino invariablemente en elementos morales y éticos, y a menudo en elementos sociales… como es imposible etiquetar cada uno separadamente según su naturaleza religiosa, moral, ética, o social, es sumamente difícil separarlos. Siempre que los dogmas religiosos son favorablemente o adversamente afectados, los principios morales, éticos, y sociales están automáticamente involucrados. Como los principios religiosos afectan los principios éticos y sociales, el paso de éstos a la esfera económica, y finalmente a la esfera política, es muy corta.”
“En el caso particular de la Iglesia católica, esto se lleva a un extremo, por la simple razón de que el Catolicismo es más rígido que cualquier otra religión en cuanto al campo espiritual. A esto se agrega el hecho de que un buen católico debe obediencia ciega a su Iglesia y debe poner el interés de su Iglesia antes que cualquier materia social o política. Ya que este cuerpo que comprende millones de tales católicos, viviendo por todo el mundo, escucha atentamente las palabras del Papa, es fácil ver el largo alcance del poder que la Iglesia católica puede ejercer en esferas no-religiosas.”
“Hay innumerables ejemplos de esta clase, por lo cual es evidente que la Iglesia Católica no puede evitar interferir en asuntos sociales y políticos. El resultado práctico de esta interferencia de los dogmas religiosos y morales en campos no-religiosos es que la Iglesia Católica está interviniendo continuamente, de una manera u otra, en la vida social y política de la sociedad en general y de ciertos países e individuos en particular. Esta interferencia puede ser de una naturaleza moderada o violenta, dependiendo de la reacción de las esferas no-religiosas ante la voz de la Iglesia.”
*Tomado del texto “El Vaticano en la Política Mundial” por Avro Manhattan
En noticias actuales podemos ver como la Iglesia Católica ejerce su influencia en asuntos “morales” poniéndose en contra de leyes que “protegen” prácticas en contra de sus enseñanzas. Como cristianos no aprobamos prácticas como el aborto, la homosexualidad, etc., pero a diferencia de nosotros, la Iglesia Católica intenta imponer sus principios a la fuerza y a cualquier precio, inclusive a no cristianos. Nosotros como cristianos estamos en contra de estas prácticas por convicción y no porque se nos obligue. El Espíritu Santo que mora en nosotros nos guía a practicar lo que es moralmente correcto y a desechar lo que no lo es. Como la Iglesia Católica considera incorrecto la práctica del aborto, el homosexualismo, el uso de preservativos, etc. ésta se empeña en luchar contra tales principios por todos los medios posibles al alcance de su poder. De ahí que intente incursionar en la esfera política para alcanzar sus propósitos. No sólo los condena en el campo religioso-moral, sino que insta a sus seguidores a combatir y rechazar todo lo que ha sido condenado por ella. Así que cuando un católico pasa a ser miembro del cuerpo legislativo de un país dado, donde un proyecto de ley que legaliza cualesquiera de estas prácticas, éste antepondrá su deber religioso y votará en contra de dicho proyecto de ley.
Veamos algunas de estas noticias:
1. El Vaticano reclama dialogar con el Gobierno sobre la ley del aborto
“También los obispos extremaron entonces sus calificativos, incluida la consideración de "asesinos" sobre quienes votaran aquel proyecto de ley.”


2. Inquietud e Indignación por opinión de Papa sobre preservativo en Africa
“Así, la ONG británica Oxfam recordó la "enorme influencia" del Pontífice y señaló su preocupación por la repercusión de sus palabras "en la gente", que podría decidir no usar el preservativo.”



3. El Vaticano se opone a despenalizar la homosexualidad
“Es de una gravedad extrema que el Vaticano, y, por tanto, la Iglesia católica entera, se mueva para que la propuesta no se apruebe, lo que sería un verdadero acto de condena a muerte contra los millones de gays y lesbianas que tienen la mala suerte de vivir en países sanguinarios", declaró Mancuso a la agencia Ansa.”


Dios ama al pecador, pero aborrece sus prácticas pecaminosas. Si como iglesia hiciéramos nuestro trabajo de llevar el mensaje del Evangelio, las personas serían regeneradas por el poder del Espíritu Santo. No es la misión de la iglesia intervenir o entremeterse en la política, sino llevar a las personas a los pies de Jesús.

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.” (Mateo 28:19-20)

“Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.” (Efesios 5:15-17)

“Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.” (Gálatas 5:19-21)

“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” (Romanos 5:8)

“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” (2 Pedro 3:9)


¡Dios te bendiga y te guarde!

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